Qué difícil desprenders del deseo cuando vives en un maremagnum de continuas contradicciones acerca de lo posible y lo imposible, vivir por y para un sueño sin poder desprenderme de lo real mientras buscas ese espejismo llamado libertad, qué difícil escapar de esa prisión de desesperación sin barrotes ni ornamentos cuando se la lleva en las venas como la droga más dura.
Si tú lo has conseguido, enhorabuena:)
P.d: un profundo te quiero, aunque no te lo creas XDDDDD
Uf, ya lo creo...
ResponderEliminarQué difícil desprenders del deseo cuando vives en un maremagnum de continuas contradicciones acerca de lo posible y lo imposible, vivir por y para un sueño sin poder desprenderme de lo real mientras buscas ese espejismo llamado libertad, qué difícil escapar de esa prisión de desesperación sin barrotes ni ornamentos cuando se la lleva en las venas como la droga más dura.
Si tú lo has conseguido, enhorabuena:)
P.d: un profundo te quiero, aunque no te lo creas XDDDDD